Dando por hecho la necesidad del control de calidad en una industria agroalimentaria… ¿Es preciso/necesario gestionarla con medios internos?.
La función del Director de Calidad
Es cierto que como en cualquier empresa, pero más si cabe en una industria que trabaja con productos de alta sensibilidad para el consumidor, la gestión de los procesos de control de la calidad debe estar centralizada en la propia industria, ya que la calidad es algo absolutamente innegociable en los productos alimenticios, algo que va intrínsecamente unido a la Seguridad Alimentaria.
De hecho la propia empresa debería de pensar en actuar como si fuera un abogado del consumidor, y asegurarse de que su mercancía llegue a él con la calidad y características que demanda.
El problema surte cuando en el proceso de toma de decisiones se pierde la perspectiva del medio y largo plazo (perspectiva estratégica), algo que puede ocurrir sobre todo a partir de un determinado tamaño de empresa, con organizaciones más o menos complejas, varios departamentos con intereses a veces contrapuestos, y los de éstos, con los de los propios consumidores, cuando entran en juego los costes.
En la planificación estratégica de la empresa agroalimentaria, el papel del Director de Calidad es fundamental e imprescindible
Es ahí donde es fundamental la figura del Director de Calidad, que supervise precisamente aspectos no cuestionables en la industria agroalimentaria, como son la Seguridad Alimentaria, la calidad especificada por nuestros productos, y una visión interna de defensa del consumidor en cuanto a las características del productos que va a adquirir.
La independencia del Director de Calidad
Hay que partir de que un director de calidad no debe tener ningún tipo de dependencia orgánica si quiere ejercer adecuadamente su función, dependiendo única y directamente del Director Gerente, que debe darle un apoyo claro y explícito (no un apoyo personal, sino un apoyo a su función), lo que se transmitirá a toda la empresa de modo automática.
Además debe recibir toda la información estratégica, formado equipo con el resto de personal directivo y supervisor, aportando el punto de vista en las decisiones y estrategias, manteniendo una posición objetiva ante los asuntos en los que intervenga dentro de sus responsabilidades.
El Director de Calidad debe mantener una posición de independencia orgánica si quiere ejercer adecuadamente su función.
En esas condiciones, serán sus conocimientos técnicos, sus capacidades organizativas y de comunicación, su orientación al cliente y su capacidad para gestionar crisis reaccionando adecuadamente a las vicisitudes que surjan, pero sin perder de vista la planificación y organización, lo que marcará su aportación a la organización y finalmente su reconocimiento como valor fundamental de la empresa. Solo su perseverancia le hará triunfar como profesional de calidad alimentaria.
Influencia sobre los procesos y las personas
La influencia de un Director de Calidad en el sector agroalimentario es extraordinaria, y viene derivada de una responsabilidad asumida desde el momento en que trabajamos en una industria que produce y comercializa productos alimenticios, con toda la carga de responsabilidad que ello conlleva, incluida la específicamente característica del sector, como es la Seguridad Alimentaria.
Su trabajo consistirá en identificar el enfoque de la calidad más pertinente y adaptado a la empresa, estableciendo un Sistema de Calidad del que se nutra todo el personal para ponerlo en práctica, con la finalidad de hacer los trabajos de la manera más fácil, rápida y eficaz y con los menos errores posibles en los procesos repetitivos.
Para ello es preciso que en la redacción de los procedimientos haya colaborado todo el personal, correspondiendo al Director de Calidad que dicho procedimiento exista, que esté al día y que se comprenda y aplique bien.
Saber delegar adecuadamente el control directo de los trabajos es una de las tareas más difíciles del Director de Calidad
El Director de Calidad es el responsable además de establecer los procedimientos de desarrollo de nuevos productos, identificando para ello las expectativas del cliente, traduciéndolas en normas internas para todo el personal.
Dada la importancia que tiene en el control de calidad nos solo el establecimiento de los procedimientos, sino la supervisión de todo proceso productivo, y que el don de la ubicuidad no se nos ha sido concedido a las personas, es muy importante para el Director de Calidad la delegación del control en los procesos y/o productos directamente en el operario, en aquel que realiza el trabajo, verificando que esté capacitado para efectuar dicho control, con formación suficiente, con instrucciones claras y concisas de lo que tiene que controlar.
Indicadores de calidad
El Director de calidad debe de ser capaz de identificar convenientemente los indicadores de calidad, asegurándose de su representatividad y su eficacia a la hora de identificar las fuentes de mejora, y que tengan repercusión directa, tanto en aquellos no cuantificables pero que repercutan en el personal, en los clientes y en los procesos, como en aquellos precisen de técnicas estadísticas, particularmente al control estadístico del proceso.
Sistemas de alarma y Auditoría
El Director de calidad tiene asimismo una importancia fundamental a la hora de suministrar información al Director Gerente y al resto del Staff Directivo cuando no se estén cumpliendo satisfactoriamente los estándares de calidad, para lo cual debe establecer y vigilar los sistemas de alarma para que salten automáticamente en el mismo instante en que el Sistema de Calidad deje de estar bajo control, asegurando a posteriori un sistema de auditoria del propio Sistema de Calidad que sea efectivo., evaluando en este proceso los progresos de la calidad realizados por toda la organización, buscando ejes de mejora.
Su influencia el la política de RR.HH. de la empresa
Formar al personal en los métodos de resolución de problemas, animar a los grupos de trabajo, implicar a todo el personal en abordar los problemas desde sus causas, son algunos de las líneas de trabajo en las que se debe involucrar al Director de Calidad.
Por último, también es misión del Director de Calidad facilitar los métodos que ayuden a la dirección a delegar la política de calidad en la acción diaria, implicando a los trabajadores en su cumplimiento, educando y formando al personal en su relación con el cliente final, y no con los niveles superiores de la organización, promoviendo el trabajo en equipo y su implicación respecto al cliente final. Esa sería la base del éxito de una política adecuada de gestión de calidad.
El Director de Calidad debe implicar a toda la organización en la búsqueda de la Excelencia en los procesos de la organización y respecto al cliente final.
Así pues, se debe concluir que una Director de Calidad es una pieza fundamental en el engranaje de la industria agroalimentaria, y aporta un valor muy elevado a la organización. Es clave en el proceso de búsqueda de la excelencia de los procesos de la organización, y es el catalizador de la cultura de colaboración y compromiso de los empleados.
En el Máster de Agronegocios de ENAE se desarrollan las materias relacionadas con la Calidad y Seguridad Agroalimentaria desde distintos puntos de vista, de manera transversal en todas las áreas de manera, y de manera más específica en el apartado dedicado a la “Gestión de Sistemas y empresas agroalimentarias, Ciclo/proceso productivo agrícola”, haciendo referencia a aspectos concretos que trataremos en otros artículos tales como la trazabilidad, normas de calidad y protocolos en supermercados, denominación de origen, gestión de fitosanitarios y fertilizantes, etc.